Como uno de los mercados bursátiles más desarrollados de la región Asia-Pacífico, el mercado de renta variable australiano presenta oportunidades de inversión únicas. Fundado en 1987 tras la fusión de seis bolsas regionales, el Australian Securities Exchange (ASX) representa toda la diversidad de la economía australiana con empresas de una serie de sectores que incluyen recursos naturales, finanzas, sanidad y tecnología. Lanzado en abril de 2000, el S&P/ASX 200 es el índice de referencia del mercado bursátil australiano. Incluye las 200 mayores empresas que cotizan en el Australian Securities Exchange (ASX) en términos de capitalización bursátil. Menos emblemático, aunque creado en enero de 1980, el All Ordinaries incluye alrededor de 500 de las mayores empresas que cotizan en el ASX, lo que lo convierte en el barómetro más amplio del mercado australiano. Otros índices bursátiles australianos, como el S&P/ASX 300, lanzado conjuntamente en abril de 2000, o el ASX Small Ordinaries, lanzado en 2000, ofrecen selecciones alternativas. El primero ampliando la selección del S&P/ASX 200 con 100 valores más, y el segundo centrándose en las pequeñas capitalizaciones del mercado australiano. A la vanguardia de la tecnología de mercado, ASX utiliza avanzados sistemas de negociación electrónica y no duda en explotar tecnologías innovadoras como blockchain para mejorar su seguridad y eficiencia comercial.